FIBROMIALGIA: CUANDO HAY QUE APRENDER A VIVIR CON DOLOR

, Viernes 10 de Mayo de 2019

El próximo 12 de mayo se celebra el Día Mundial de la Fibromialgia y el Síndrome de la Fatiga Crónica, jornada que se viene conmemorando desde el año 1993 en conmemoración del nacimiento de Florence Nightingale, la enfermera inglesa que inspiró la fundación de la Cruz Roja, y que contrajo una enfermedad paralizante cuando contaba con 35 años y que la mantuvo postrada en una cama el último medio siglo de vida; algo que, sin embargo, no le impidió fundar la que se convertiría en la primera escuela de enfermería a nivel mundial. 

¿Por qué celebrar un Día de la Fibromialgia y el Síndrome de la Fatiga Crónica? En España, cada año se diagnostican casi 120.000 casos de Fibromialgia y Síndrome de Fatiga, algo que hace especialmente necesaria la concienciación sobre la importante problemática a la que estos enfermos han de hacer frente cada día y que pasa inadvertida para un elevado porcentaje de la sociedad. 

Hablar de fibromialgia es hacerlo de una enfermedad reumatológica común que afecta al 2%-4% de la población en general, del cual alrededor de un 85% son mujeres con edades comprendidas entre los 25 y los 50 años. Entre sus características definitorias se encuentra el dolor generalizado crónico y la hipersensibilidad en determinadas áreas del cuerpo (son los llamados tender points). Además de dolor, la fibromialgia puede ocasionar rigidez generalizada, sobre todo cada mañana al levantarse, y sensación de inflamación más localizada tanto en manos como en pies; sin olvidar los hormigueos poco definidos que afecta, sobre todo, a las manos. 

Hoy, a través de esta pequeña ventana al mundo, queremos lanzar un pequeño hilo de esperanza a quienes sufren esta enfermedad invalidante. Y es que dos bioquímicos españoles –los doctores Mario Cordero y Plácido Navas- han descubierto una manera de reducir de manera importante tanto el dolor como la fatiga recurrentes que caracterizan esta dolorosa enfermedad. Aparentemente, la fibromialgia no es otra cosa que la existencia de una serie de células musculares que no funciona correctamente al contar con niveles reducidos de un compuesto natural denominado coenzima Q10, imprescindible para que éstas puedan llevar a cabo sus funciones de manera óptima. Por ello, parece ser que esta dolencia podría mejorar tomando complementos de este compuesto. 

Así, ambos investigadores decidieron comprobar cómo la coenzima Q10 en forma de cápsulas podría influir positivamente en el día a día de quienes padecen fibromialgia. Para ello, seleccionaron 20 mujeres con fibromialgia y, de manera aleatoria, les asignaron la toma diaria de o bien 300 mg de coenzima Q10 (ActiveComplex Q10 Gold), o bien cápsulas placebo sin efecto para comprobar cuál era su nivel de respuesta a ambos tratamientos. La diferencia que obtuvieron fue más que llamativa. Los resultados pusieron de manifiesto que aquellas mujeres que habían tomado la coenzima Q10 habían disminuido de manera más que considerable los síntomas de fibromialgia. 

Este estudio –que fue publicado en la revista Nature- es especialmente importante para quienes padecen fibromialgia, ya que las actuales terapias medicinales contra la enfermedad tienen un efecto bastante limitado, que impide a quienes sufren esta dolencia llevar una vida realmente normal. 

¿Qué es el Q10?

ActiveComplex Q10 Gold, de Pharmanord, es el preparado de coenzima Q10 que se empleó en la investigación a la que hemos aludido en líneas anteriores siendo, además, el producto oficial de referencia de la Asociación Internacional de la Coenzima Q10 (ICQA). Normalmente, al cuerpo humano le cuesta absorber la coenzima Q10, pero ActiveComplex Q10 Gold es fabricado empleando una fórmula especial que permite a las moléculas de Q10 penetrar la membrana intestinal y entrar en el flujo sanguíneo.

Fuente: Nature 2013; 493, 346-355 doi 10.1038/ nature 11862