Artrosis. Cómo reducir el dolor en otoño

Lunes 25 de Octubre de 2021

Las personas con enfermedades reumáticas suelen coincidir en el hecho de que con la llegada del otoño experimentan un empeoramiento del dolor en sus articulaciones. ¿Hasta qué punto esto es así? ¿Existe una explicación real? ¿Ocurre en todas las enfermedades reumáticas? ¿Podemos hacer algo para mejorarlo? Sigue leyendo con atención. ¡Intentamos despejar tus dudas!

Artrosis 1_Farmacia I+

A pesar de que con la llegada del otoño -época caracterizada por un descenso de las temperaturas y un incremento de la humedad ambiental- las consultas se llenan de pacientes que refieren más dolores en sus articulaciones, las investigaciones realizadas al respecto no muestran evidencias científicas claras de que tenga lugar esta conjunción. Por lo tanto, y aunque la cultura general y la práctica diaria demuestran que sí puede darse esa coincidencia e incluso existen personas que notan cuándo va a cambiar el tiempo, la realidad que muestran los estudios científicos es distinta. De hecho, las diferentes investigaciones realizadas sobre la repercusión de los cambios de tiempo en el dolor de huesos y en las articulaciones han llegado, en ocasiones, a conclusiones algo contradictorias. 

No obstante, es posible que sí que exista alguna relación ya que tanto en Grecia como en Roma, los médicos sí hacen referencia a esto. Y, además, en la medicina tradicional china el reumatismo es sinónimo de enfermedad del viento y de humedad, por lo que estamos ante una creencia que parece contar con muchos siglos de historia. 

¿Por qué esta creencia?

Entre las posibles teorías que existen para explicar esta relación, las hay que indican que cuando las temperaturas bajan y hace más frío, el líquido sinovial que lubrica las articulaciones se hace más denso, algo que termina provocando que aumente la fricción entre las estructuras articulares y, por consiguiente, el dolor haga su aparición en las mismas. 

Otra de las teorías que se manejan apuntaría a la existencia de ‘barorreceptores’ de presión, que estarían interconectados con los receptores del dolor o ‘nocireceptores’. Por lo tanto, cuando se estimula uno, se estimularía el otro, lo que significaría que si tiene lugar un cambio de presión procedente de un cambio en el tiempo, los barorreceptores se activarían poniendo en marcha, a su vez, a los receptores del dolor. 

Artrosis 2_Farmacia I+

¿Significa que hay un empeoramiento?

A pesar de que habitualmente se intenta encontrar una relación entre el cambio de estación y de condiciones meteorológicas y el incremento de dolor en las articulaciones de personas que padecen artrosis, ya que es la enfermedad degenerativa por excelencia, también puede ocurrir en enfermos aquejados de artritis reumatoide, espondilitis y lupus. 
Algo importante que merece ser reseñado es que aunque los pacientes perciban un empeoramiento de sus síntomas, es decir aunque tengan más dolor en sus articulaciones, esto no significa que su enfermedad haya empeorado.  

5 tips para combatir el dolor articular en otoño

Si con la llegada del otoño tus articulaciones empiezan a resentirse, hay algunas indicaciones que puedes seguir para que nada te impida disfrutar de la nueva estación:

1.- Las bolsas de agua caliente o mantas eléctricas pueden convertirse en buenos compañeros de la nueva estación. Ten siempre a mano alguna de estas opciones para poder aplicar claro sobre la zona en la que tienes dolor. 
2.- ¡Ojo con el peso! Si tienes algunos kilitos de más tus articulaciones tendrán que soportar peso extra, por lo que será más normal que aparezcan las lesiones y, por lo tanto, el dolor. 
3.- Incluir el deporte en tu rutina diaria te será de gran ayuda. Yoga, natación, pilares… lo ideal es apostar por actividades que te ayuden a fortalecer tus músculos. ¡Muy importante! Apuesta por deportes que no vayan a provocarte impacto excesivo en tus articulaciones.
4.- Aleja de tu vida hábitos como el tabaco y el alcohol que, además de no ser nada beneficiosos para tu salud, en general, no te ayudarán a mantener tus articulaciones sanas, en particular.
5.- Mantener una alimentación equilibrada es muy importante. Apuesta por alimentos que tengan propiedades antiinflamatorias como el jengibre o la cúrcuma; ricos en Omega 3 (pescados azules); con antioxidantes (té verde) y con alto contenido en vitamina E (frutos secos, verduras de hoja verde…). 

Ahora sí, ¡con estos consejos tus articulaciones están preparadas para disfrutar del otoño!